Enrique Aranda
De naturaleza política
- Entonces sí que vendrá la etapa final y el cierre de un nada afortunado montaje.
¿A cambio de qué embajada la abyección, Alfredito?
En marcha ya la puesta en escena del que se pretenda sea el acto final, el cierre del “montaje” que para elegir al presunto sucesor de Andrés Manuel López Obrador ocupa la atención de la clase política, de un sector de ella, al menos, las cosas al interior del oficialismo no parecen estar en forma alguna tranquilas, sino muy por el contrario, no son pocos los lopezobradoristas de cepa quienes aseguran que “las aguas se encuentran fuera de madre…”.
Fuera de madre… sí, literal, porque si bien desde su eventual estreno la trama de la obra, hoy a punto de concluir, fue impuesta y aceptada como la ruta a seguir por las corcholatas seleccionadas por el inquilino de Palacio para seleccionar democráticamente al nuevo coordinador de la 4T —a quien hoy mismo, por cierto, podría entregársele el “bastón de mando” que le identificará como tal y como virtual candidato presidencial de Morena de cara a la elección de junio— ahora resulta que los más fieles y acríticos aplaudidores del tabasqueño han comenzado a externar su convicción de que el montaje terminará “o en una escena de vergonzante la sumisión o, quiérase que no, en la fractura” del movimiento gestado por aquél.
Y esto, cito palabras de sus ahora críticos, porque la obra que debió conducirse en forma tersa y sin mayores contratiempos por parte de su incuestionable director, los protagonistas y hasta el partido del gobierno, a cuya administración se encargó el montaje cotidiano ahora, al inicio de la escena del conteo final de los accidentados y nada pulcros sondeos levantados para seleccionar al ganador de la puja —“para avalar el dedazo de Palacio” se diría ahora— enfrenta toda suerte de críticas provenientes de sus propias filas, a causa de la innegable certeza existente desde un primer momento de que el “final feliz, diseñado por YSQ” para encumbrar a la impresentable exregenta eco, su predilecta Claudia Sheinbaum como la estrella a vitorear.
La pregunta prevaleciente entre los “nuevos detractores o críticos” del fracasado movimiento de la 4T, no es otra sino ¿qué sucederá si alguna de las tres corcholatas morenas restantes —Marcelo Ebrard Casaubón, Adán Augusto López o Ricardo Monreal Ávila— decide mantener su formal rechazo al “sondeo de sondeos” realizado y predefinido en Palacio y, después, como seguramente ocurrirá, las corcholatitas de relleno optan por recurrir a los órganos responsables de definir este tipo de diferendos… entonces sí que vendrá la etapa final y el cierre de un nada afortunado montaje que, desde un primer momento, comenzó a evidenciar fracturas y profundas contradicciones. Es cuestión de tiempo, es verdad, de días u horas, incluso.
- ASTERISCOS
* En el marco de la presentación de Anatomía de la norma jurídica. Giro semiótico trascendental, durante la 14ª Feria Nacional del Libro Jurídico 2023, el magistrado Felipe Fuentes Barrera esclareció por qué el Tribunal Electoral federal ha debido reconsiderar su posición práctica para juzgar nuevas formas de impulsar candidaturas de cara al 2024 sin violentar con ello la letra y espíritu de la ley. Bien.
Veámonos el viernes con otro asunto De naturaleza política.
