Por Gonzalo Martínez
Han sido alrededor de 10 años los que me han tocado compartir en Contexto de Durango, años de trabajo, de evolución, de retos, pero sobre todo de aventuras y buenos y productivos momentos al lado de nuestro fundador y director, el licenciado Miguel Ángel Vargas.
Hablar del Lic, es hablar de Contexto y viceversa. Con él, tuve la dicha de tener mi primera oportunidad laboral y hasta el día de hoy solo tengo agradecimiento y un enorme cariño hacia su persona y hacia el medio de comunicación que él fundó y dirigió durante 30 años.
Este año es diferente para todos, porque “La voz de los que no tienen” se apagó, pero solo en este plano,
porque ahora sus ecos resuenan desde arriba para de esa manera, seguirle dando voz a cada noticia, a cada evento deportivo que era lo que al licenciado más le emocionaba cubrir. Fueron años de aprendizaje y
momentos inolvidables en esas coberturas deportivas al lado del licenciado, donde siempre puso el
bienestar de sus compañeros antes que el de él mismo. Que si a tal o cual no le gustaba esta comida o este lugar para tomar los alimentos, siempre lo resolvía y anteponía los gustos y las
preferencias de los demás.
Lo anterior solo habla un poco del gran ser humano que fue y no solo en el aspecto laboral, en lo personal también (no solo a mí, a todos mis compañeros y amigos estoy seguro) siempre tenía un consejo sabio, una
charla que te hacía reflexionar y rectificar si no “ibas por el buen camino”.
Hoy, solo me resta decir: gracias totales, Lic (Contexto de Durango). En este plano ya no está, pero vive, vive en ese consejo sabio, en esa enseñanza, en ese apoyo, en ese granito de arena que dejó en cada uno
de nosotros, ¡Miguel Ángel “Mike”, vive!
