Por Gonzalo Martínez
Nueve policías de Veracruz han sido puestos en prisión preventiva acusados formalmente del asesinato de un comerciante durante una protesta, según informaron las autoridades ministeriales. Los policías pertenecen a la Policía Municipal de San Andrés Tuxtla, una localidad en el sur del estado, gobernada por el partido oficialista Morena.
La Fiscalía General del Estado presentó a los policías ante un juez y los acusó de homicidio doloso calificado, lo que resultó en una orden de prisión preventiva de un año mientras se concluye el juicio.
Los hechos ocurrieron cuando un grupo de comerciantes del Mercado Municipal de San Andrés Tuxtla se manifestaba y bloqueaba las obras de construcción y remodelación del mercado. Durante la protesta, los agentes detuvieron a Jorge Luis, un comerciante de carne que estaba transmitiendo la manifestación en vivo por redes sociales. Sus compañeros documentaron su arresto violento y denunciaron que fue llevado a la cárcel local, donde murió horas después. Su cuerpo fue trasladado a un hospital posteriormente.
La detención y muerte de Jorge Luis provocaron que los habitantes de la zona se manifestaran en la sede municipal, incendiando un vehículo policial y exigiendo justicia. La reacción de la comunidad llevó a la detención de los nueve policías, ahora formalmente acusados de homicidio.
Este caso ocurre poco después de otro incidente violento en Veracruz, donde un desalojo policial de una comunidad que protestaba por la contaminación de la industria porcina resultó en dos muertos y una docena de heridos. Este desalojo tuvo lugar en Totalco, municipio de Perote, donde opera Granjas Carroll, una empresa dedicada a la cría y procesamiento de ganado porcino.
Además, la semana pasada, cinco elementos de la Guardia Nacional fueron detenidos tras una masacre en León, Guanajuato, donde cuatro mujeres y dos niños fueron asesinados.
Estos incidentes han generado preocupación y críticas sobre el uso de la fuerza y la actuación de las fuerzas del orden en México.
