Por Angel Castillo.
Durango dgo.

El Palacio de los Combates, ubicado en la colonia División del Norte, fue el escenario perfecto para la tercera edición de The New Super Star, un evento que no solo emocionó al público, sino que también vio nacer a las nuevas promesas del boxeo amateur en Durango. Con combates llenos de intensidad, técnica y corazón, los jóvenes pugilistas demostraron que el futuro del boxeo en el estado está en buenas manos.
Una tarde de emociones y talento
Desde las categorías Pre-Infantil hasta la Élite, cada combate fue una batalla de estrategia y determinación. En la categoría Pre-Infantil, Saúl Güereca (GKBA) y Damián Granados (Lerdo) se llevaron las primeras victorias, mientras que en la Infantil, nombres como Gael Guerrero (Lupita) y Lesslie Gallegos (Buenos) brillaron con decisiones unánimes y divididas.
En la categoría Juvenil, Hugo Gómez (Buenos) y Fernanda Vázquez (Bulls) dejaron claro que el talento no tiene género, imponiéndose con decisiones unánimes en sus respectivos combates. Mientras tanto, en la Élite, Edwin Jasso (Puma) y Josué Ríos (Trejos) cerraron la noche con victorias contundentes, demostrando que el boxeo duranguense tiene un presente y un futuro lleno de potencial.

El espíritu de superación
Más allá de los resultados, lo que quedó claro en el Palacio de los Combates fue el espíritu de superación de cada uno de los participantes. Desde los más pequeños hasta los más experimentados, todos subieron al ring con un objetivo: dar lo mejor de sí mismos. Y lo lograron, dejando al público con ganas de más.
El legado de The New Super Star

Este evento, organizado por entrenadores como Eduardo “Lalito” Bueno Torres, los hermanos Saúl y Teresa Güereca, y Rubén Soto, no solo es una plataforma para que los jóvenes boxeadores demuestren su talento, sino también un espacio que fomenta la disciplina, el respeto y la pasión por el deporte.
Con una tercera edición que superó todas las expectativas, The New Super Star se consolida como un evento clave para el boxeo amateur en Durango. El público ya espera con ansias la cuarta edición, que promete seguir impulsando el deporte de las narices chatas en el estado.











