Por Geraldo Rosales
Durango, Dgo.
El trovador internacional Alberto Zárraga durante más de tres décadas ha recorrido México convirtiéndose en un embajador de nuestro estado a través de su música en el extranjero, especialmente en Países Bajos, donde reside actualmente, en su reciente visita a Durango ofreció una emotiva charla
-¿Qué ha pasado últimamente con Alberto Zárraga?
¿Qué ha pasado?, muchísimas experiencias que me han hecho crecer como persona, como mexicano, como un ciudadano más del mundo y en la música esto me está generando un mayor encuentro conmigo mismo, sigo defendiendo lo que soy con mi guitarra al hombro, ahora estoy en una cultura donde los festivales y encuentros son muy comunes y normalmente vas a escuchar a gente que invitan pero es en inglés, yo no hablo inglés, entonces lo primero que hice fue meterme cantar en tele, primero música mexicana y latinoamericana, que fue la influencia que me dejó Mecapal.
–Los “Zarragazos” por el mundo y su nueva influencia musical
Sigo componiendo, cantando español, aprendido también a cantar canciones que me influenciaron cuando viví en Montenegro, en los Balcanes, yo tenía una ligera idea de cómo era, pero haberla vivido, haber escuchado la música ortodoxa de la iglesia, los coros, su influencia a través de su orquestación la música montenegrina, Montenegro formó parte de Yugoslavia entonces es interesante escuchar su música, ver y conocer de dónde nacen esos sonidos que utilizamos como latinos, me impactó y estoy también aprendiendo algunas canciones de esta región para conciertos, así como holandesas.
-Lo que extraña más de México, pero sobre todo de Durango
El 98 por ciento de mexicanos que salimos, que partimos por periodos muy largos es la comida lo que más se extraña, el sabor, el picor, los saborcitos de tu casa, de las gorditas; en mi caso donde estoy (Países Bajos, antes Holanda) no hay muchos del norte, más bien mexicanos del sur, algunos de Monterrey, somos pocos los de norte, es más ni duranguenses y yo defiendo mucho que soy del norte, que soy de Durango y que comemos gorditas.
-El día que preparó gorditas para los neerlandeses
La iglesia a la que asisto internacional también una ocasión hubo una muestra de platillos de cada país y los hermanos dela congregación me dijeron ¿Alberto vas a traer tacos?, y les dije no, pero que les iba a preparar unas gorditas, curiosamente para un cumpleaños me regalaron un kilo de Maseca, para que no extrañara las tortillas, entonces dije vamos hacer gorditas, ya en una ocasión cuando tenía el programa de Con la Guitarra al Hombro me tocó tortear, las preparé, las rellené de picadillo, chile rojo, queso y papás con su verdurita, hice cómo unas 100 la verdad yo admiro a quienes las hacen todos días y bueno les gusto y fueron un éxito.
-Lo que piensa de la Trova actual
La música siempre va a tener que estar atenta a sus cambios a sus pasos e influencias y con ella también los compositores, no va hacer lo mismo que haca 20 o 30 años al momento de expresar un sentimiento de amor, un amor roto, una decepción por una sociedad que le falta algo o esa intensión, de que la gente reflexione en ciertos temas, va estar evolucionando en el lenguaje y en la música pero seguirá llamándose trova aunque quizá nazca un subgénero, pero seguirá siendo trova siempre y cuando sea reconocida por aquel que se proclame compositor o canta autor
-Durango su “todo” y recordando a Miguel Ángel Vargas
Por último, expresó que Durango representa para él “todo” y siempre que está lejos lo lleva en la sangre, por eso quiere seguir cantando y llevando su arte por amor a Durango, así mismo lamentó la partida física de nuestro director y fundador de Contexto de Durango, Miguel Ángel Vargas Quiñones a quien siempre consideró un amigo y sobre todo, agradecido por haber sido un gran difusor de su trabajo como cantante y un gran apoyo siempre a su carrera a través de este medio importante de comunicación.