Entre música, color y emoción, la Callejoneada Rosa 2025 se llenó de historias de mujeres que vencieron al cáncer de mama y hoy inspiran a otras a no rendirse.
El gobernador Esteban Villegas Villarreal y su esposa Marisol Rosso acompañaron el recorrido, donde se escucharon testimonios de sobrevivientes que recordaron la importancia de la autoexploración y la detección temprana.
“Yo me exploré y sentí un nódulo, aunque no lo creía. Fui al médico y sí era cáncer. Gracias a Dios estoy viva”, compartió Margarita Ceceñas Fernández, quien superó la enfermedad en 2015 y llamó a todas las mujeres a conocerse y revisarse.
Otra de las participantes, Rosa Elvia Jaques, destacó que actividades como la Callejoneada Rosa ayudan a vencer el miedo y acercar la atención médica: “El cáncer a tiempo es curable; yo tuve cáncer metastásico y aquí estoy”.
En medio de aplausos, las integrantes del grupo Unidas de Corazón recordaron que esta lucha también es por la unión y el amor entre mujeres: “No estamos solas; tenemos que seguir adelante y vivir sanas”, dijo Marisol Marina Hernández, quien participará también en la próxima Marea Rosa.
Cada paso, cada canción y cada historia hicieron de la Callejoneada Rosa una jornada de esperanza. En Durango, la lucha contra el cáncer de mama se vive con fuerza, prevención y acompañamiento.



