Por Gonzalo Martínez
Durango, Dgo.
El espíritu de servicio que caracteriza a los comedores comunitarios es el corazón de una iniciativa impulsada por el alcalde Toño Ochoa, que transforma la vida de miles de familias duranguenses mediante una alimentación saludable. Esta iniciativa, conocida como “Nutriendo Almas”, se centra en elevar la calidad de vida de los beneficiarios, proporcionando una nutrición adecuada y un apoyo invaluable.
María de Lourdes Flores, cocinera en El Ciprés, destacó el impacto positivo de programas como este. “No solo mejoran la nutrición de las niñas, niños y sus familias, sino que también iluminan su estado de ánimo, haciéndolos más felices”, afirmó.
Flores señaló además que, al principio, las familias llegan sin un entendimiento claro sobre la correcta alimentación, pero con el tiempo y cada comida, aprenden más. “Me conforta ver a los niños que llegan felices a comer, eso también nutre mi alma”, añadió.
Actualmente, el programa cuenta con 10 Comedores Comunitarios en funcionamiento, reafirmando el compromiso de Toño Ochoa con los más pequeños. Estos comedores se han convertido en una segunda casa para muchos duranguenses, ofreciendo un servicio de calidad que enriquece la vida de sus beneficiarios.
El personal del DIF Municipal, encargado del programa, entrega cada porción con profesionalismo y una gran sensibilidad, reflejando el compromiso de mejorar la nutrición y el bienestar de la comunidad. Con esta iniciativa, Toño Ochoa sigue demostrando su dedicación a la mejora de la calidad de vida en Durango, trabajando con sensibilidad y dedicación para hacer de estos comedores un recurso vital para las familias.
Comedores comunitarios, un compromiso con la nutrición y el bienestar de las familias
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