Martha Casas
Durango, Dgo.- Con el rostro marcado por el cansancio y la tristeza, Carlos Said Arellano habló al término del triduo de misas celebrado en la iglesia de Los Ángeles por el alma de su hija, Paloma Nicole, la adolescente de 14 años que perdió la vida tras ser sometida a una triple cirugía estética en Durango.
“Ella era mi todo”
“Lo más terrible es ya no tener a mi niña conmigo… ella era mi todo: los viajes, las comidas, las pláticas. Era mi vida entera”, dijo con lágrimas en los ojos, recordando a la pequeña que murió sin que él tuviera conocimiento de la intervención, la cual se realizó con la autorización de su madre y en manos del padrastro de la menor.

Ausencia de la madre
Desde entonces, confesó, no ha tenido ningún contacto con la madre de Paloma, quien no se ha presentado ni para despedirla, ni en las misas de cuerpo presente, ni en las celebraciones religiosas posteriores. “No ha dado la cara, no sé dónde está”, expresó.
Confianza en la justicia; reunión con el gobernador
El padre reconoció lo desgastante que ha sido enfrentar esta tragedia, pero aseguró tener confianza en las autoridades. “Creo que se actuará conforme a la ley, sin influencias ni favoritismos para los responsables”. Adelantó que en los próximos días buscará reunirse con el gobernador del estado y agradeció la atención del mandatario, Esteban Villegas, así como el respaldo expresado por la presidenta de la República, Claudia Sheinbaum.
Además agradeció a toda la gente que se ha volcado a apoyarlo, porque en medio del dolor, ese respaldo y el deseo de justicia lo hacen levantarse.
Que no se repita: Ley Nicole
Con firmeza, hizo un llamado a legislar y establecer medidas que protejan a las y los menores: “Que ninguna niña vuelva a perder la vida en manos de cirujanos plásticos, y que ningún padre vuelva a pasar por este dolor tan inmenso”.
Marcha por Paloma Nicole
Finalmente, invitó a la ciudadanía a sumarse a la marcha pacífica que se llevará a cabo el próximo sábado, a las 17:00 horas, partiendo del Hotel Gobernador por la avenida 20 de Noviembre. Pidió a quienes asistan llevar una vela y globos blancos, y de ser posible vestir de blanco, como un gesto de unidad y exigencia de justicia.
Paloma Nicole ya no está, pero su recuerdo permanece como un llamado urgente a la conciencia: que la vida de una niña no se vuelva a apagar por decisiones ajenas, y que el dolor de un padre sirva para abrirle los ojos a toda una sociedad.