José Miguel Castro Carrillo
Ícono del cine de la época de oro, protagonista de una vida inolvidable, Aguirre cumplirá 95 años en septiembre de este 2025, quien aseguró que aunque nunca pensó ser actriz, el destino la llevó por una trayectoria artística que desarrolló a plenitud y con gran pasión.
Elsa Irma Aguirre Juárez, nacida en Chihuahua, Chihuahua, el 25 de septiembre de 1930, ha sido reconocida por su talento y presencia natural desde sus 14 años, cuando era estudiante de secundaria y ganó un concurso de belleza. Sus padres fueron Jesús Aguirre y Emma Juárez. Ella fue la cuarta de cinco hermanos: Alma Rosa, Hilda, Jesús y Mario. Pero la artista pone especial énfasis cuando habla de su hijo, a quien amó con toda su alma, ya que fue una experiencia enorme ser madre. Amor y conciencia son necesarios para educar a los hijos, pero sin prohibir nada.
Su primera incursión en el séptimo arte fue en El sexo fuerte, de Emilio Gómez Muriel, pero fue el mejor director, Julio Bracho, quien le ofreció el protagónico en Don Simón de Lira (1946), al lado de Joaquín Pardavé. El cineasta la fue a buscar en su lujoso carro blanco a la casa donde vivía la familia en Mixcoac. Su mamá aceptó el contrato, firmó y, a partir de entonces, llegaron todos los estelares.
En sus propias palabras, ni en su imaginación pensó en ser artista de cine, ni famosa o tener dinero, jamás. No le llamaba eso, su palabra interna era volar. No actuaba, vivía todo aquello, puntualizó la estrella, quien descubrió la vida a través de sus películas.
“Fui muy independiente, pero siempre estuve atenta y muy cerca de mis padres, fui más que nada hija de familia, aún con mi trabajo y todo, ellos eran lo más importante” y ahora sólo transmite las innumerables experiencias de su vida, porque no sabía dónde estaba parada. Tenía casi 15 años y no quería abrirse a la vida y, de repente, se ve metida en el cine, con las cámaras, las personas y con una educación que no fue como debía ser, según la actriz.
Su papá era militar, hijo de mujer de pueblo mientras que su mamá fue hija de una mujer aristocrata, del Norte y fue representante de ella y de su hermana Alma Rosa, por lo que sería quien firmaba contratos y llevaba a sus hijas a incursionar en el cine, aunque después también lo harían en la televisión, radio, cabaret y el teatro.
La trayectoria fílmica de Elsa Aguirre suma alrededor de 50 películas de diversos géneros. Compartió créditos con celebridades de la época dorada del cine mexicano, además de Negrete y Pedro Infante, con Dolores del Río, Silvia Pinal, Ignacio López Tarso, Pedro Armendáriz, Mario Moreno Cantinflas, Marga López, Julio Alemán, Joaquín Cordero y Mauricio Garcés, entre otros. Sobre el primer movimiento de atracción, Aguirre lo sintió con el comediante Luis Sandrini, luego Luis Aguilar, Pedro Infante y Jorge Negrete. Fue novia de Jorge Negrete a los 19 años y le regalaba libros, pero nunca los leyó, lo que la llevó a terminar la relación, y al poco tiempo el Charro Cantor se casó con María Félix. Aunque tuvo varios matrimonios, considera que no tuvo la pareja ideal.
Luego, se interesó y encontró su camino en las enseñanzas de su gran gurú, el doctor José Manuel Estrada, por lo que practicó yoga, meditaba y colaboró con servicio social en presidios. Está convencida de que si la humanidad no se intoxicara, otro mundo sería, pero lo más importante es “no pedir para uno, sino para los demás, así como vivir aquí y ahora.
Está consciente de los ciclos de la vida, por lo que para ella “la vida es bonita, hay que vivir cada momento, agradezco infinitamente todo y siempre digo: que se haga la voluntad de Dios, no la mía”.
