Luego de que la SEDENA recibiera una inyección económica de 2 mil 500 mdp para este programa por parte de Bienestar, actualmente se encuentra en el olvido.
Por Luis Juárez
Uno de los programas insignias del Presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) “Sembrando Vida” por el cual viveros de la Secretaría de la Defensa Nacional (SERDENA) recibieron un apoyo de 2 mil 500 mdp, de la Secretaría del Bienestar, actualmente se encuentran abandonados.
Incluso de contar con 2 mil 617 personas designadas a atender este programa, entre jornaleros y militares, tan solo este año se cuenta con solo 12 trabajadores que se encuentran en funciones en el vivero de Tapachula, Chiapas. Gracias a esto no se espera producción alguna.
Como estrategia del Gobierno Federal, para rescatar el campo mexicano y reactivar la economía local, se hizo presente el famoso programa “Sembrando Vidas” supervisado por la Secretaría del Bienestar.
Este programa vio la luz del día el año 2019, con una producción de 100 millones 42 mil 349 árboles maderables, en 2020 se produjeron 115 millones de árboles maderables y agroindustriales. Sin embargo, en el año de 2021, se planteó como meta la producción de 57 millones 251,455 de árboles frutales, forestales y agroindustriales.
Pero, conforme a información obtenida por la revista digital EME EQUIS por medio de una solicitud de transparencia realizada el 27 de marzo de 2024, la SEDENA dio a conocer que sólo el vivero ubicad en Tapachula, Chiapas, de 30 que se habrían colocado en funcionamiento en un principio, se encuentran únicamente 12 militares que trabajan el área.
Mientras que los otros 29 ubicados en distintos sitios de la república, ya no cuentan con el personal y esta misma secretaría dio a conocer que no se contempla producción alguna para año 2024.
Mediante estos datos recaudados por EME EQUIS, se determinó que solo 409 personas, entre civiles y militares trabajaban en 2023, para después ir en deceso y contar con solo 12 militares en el vivero de Tapachula Chiapas, mientras que los demás no cuentan con personal, considerándolos como un proyecto desperdiciado.
Las transferencias de esta suma de dinero habría sido realizada por la Secretaría del Bienestar hacia a SEDENA, en donde se incluían conceptos de diferentes acciones como la rehabilitación de 23 viveros que ya existían y la creación de siete nuevos, con la finalidad de que beneficiarios pudieran sembrar en sus tierras.
