Por: Martha Casas.
La presidenta del Colegio de Enfermeras de Durango, Iyali Rosales, lamentó que el personal de enfermería vuelva a ser objeto de ataques y descalificaciones por parte de la ciudadanía, luego del robo de la bebé Judith ocurrido en el Hospital Materno Infantil.
Señaló que en redes sociales y espacios públicos se han difundido comentarios ofensivos que responsabilizan injustamente a las enfermeras, pese a que no existe ninguna evidencia que las vincule con el hecho.
Rosales recordó que este tipo de agresiones ya se había presentado durante la pandemia de COVID-19, cuando muchas enfermeras fueron insultadas, rociadas con cloro e incluso amenazadas con armas por temor o desconocimiento.
La presidenta del Colegio pidió a la población evitar la estigmatización y no criminalizar a quienes, dijo, “han estado siempre al frente del cuidado de la salud y merecen respeto por su labor”.


 
         
        

