Fue después de la Independencia cuando se agregó un águila a la bandera, la cual representa la tradición prehispánica y la identidad del patriotismo mexicano.
Por: Geraldo Rosales
Hoy celebramos el Día de la Bandera, un orgullo para los mexicanos que se refleja en los colores verde, blanco y rojo, así como en el emblemático águila devorando a la serpiente, símbolos que nos dan identidad y arraigo.
El Día de la Bandera Mexicana se estableció el 24 de febrero de 1934 y fue reconocido oficialmente en 1940 por el presidente Lázaro Cárdenas del Río. Su origen se remonta a la Independencia de México en 1821, cuando Agustín de Iturbide creó este símbolo patrio.
Orígenes de la bandera
La historia de la bandera mexicana se enlaza con el movimiento independentista. Algunos historiadores afirman que Miguel Hidalgo ondeó un estandarte la madrugada del 16 de septiembre de 1810 durante el Grito de Independencia. Sin embargo, lo cierto es que cuando su ejército tomó Atotonilco, el cura adaptó un óleo con la imagen de la Virgen de Guadalupe, convirtiéndolo en la insignia de la lucha independentista. Este estandarte es considerado la primera bandera de México.
Tras la proclamación del Plan de Iguala en 1821, el gobierno de Agustín de Iturbide adoptó la bandera del Ejército Trigarante como símbolo de un nuevo comienzo. Fue la primera insignia en portar los colores verde, blanco y rojo, aunque con un significado distinto al actual:
- Verde: Religión
- Blanco: Independencia
- Rojo: Unión
Fue después de la Independencia cuando se agregó un águila a la bandera, un elemento que representa la tradición prehispánica y refuerza el sentimiento de patriotismo, evolucionando hasta convertirse en un símbolo de nacionalismo.
Evolución del diseño
Con la llegada de Maximiliano de Habsburgo y su esposa Carlota en 1863, se instauró un nuevo diseño para la bandera de México. Esta versión incluía cuatro águilas coronadas en cada esquina, conservando los tres colores originales, pero con un gran parecido al Escudo Imperial Francés. Sin embargo, esta bandera solo perduró hasta 1867, cuando Maximiliano fue fusilado.
Durante la Revolución Mexicana, el presidente Venustiano Carranza expidió un decreto en 1916 para que el escudo de la insignia del Ejército Trigarante volviera a aparecer en la bandera, con ligeras modificaciones:
- Un águila de perfil
- Con alas en actitud de ataque
- Devorando una serpiente de cascabel
Este diseño retomó el símbolo que, según la leyenda mexica, indicaba el lugar donde los aztecas fundarían México-Tenochtitlan.
Finalmente, en 1968, el presidente Gustavo Díaz Ordaz, en el marco de los XIX Juegos Olímpicos celebrados en México, proclamó un decreto con la “Ley sobre las características y el uso del Escudo, la Bandera y el Himno Nacionales”, estableciendo la versión definitiva de la bandera mexicana que conocemos hoy en día.
