Ciudad de México.- Tener nuevas perspectivas sobre la literatura y sus formas es una de las muchas posibilidades que otorga la lectura de textos y autores alejados de nuestras circunstancias, a lo cual se agregan las posibilidades proporcionadas por otras culturas y regiones en cuanto a goce estético, literario y a pensamiento crítico y analítico, aseguró el académico de la Facultad de Filosofía y Letras (FFyL) de la UNAM Mario Murgia Elizalde.
Abdulrazak Gurnah, ganador del Premio Nobel de Literatura 2021, abre nuevas puertas a la experiencia literaria, social e histórica, a pesar de que era, hasta hace poco tiempo, un escritor conocido sólo por quienes se interesan en lo que se ha llamado la literatura poscolonial, cuyo origen está en el continente africano, explica Murgia Elizalde.
Más allá de eso, era impopular, los especialistas estaban conscientes de su obra y quizá por ello fue elegido para colocarlo en la perspectiva mundial, agrega el universitario a propósito del otorgamiento del máximo galardón al escritor tanzano, autor de 12 novelas que abordan, en su mayoría, el tema de la migración.
“Me gustaría pensar en esta ocasión que la Academia se decantó por un autor, en principio virtuoso, pero que además debería ser digno de mayor reconocimiento en el ámbito internacional y el premio Nobel lo pone debajo del reflector. Hay gente que no había leído una sola de sus líneas, y en horas está consciente de su existencia”, explicó el investigador.
Por lo anterior, es trascendente que se le otorgue esta distinción sobre todo en este momento en el cual tópicos como la migración están avivados y son complejos de abordar, manifestó Murgia Elizalde.
“Claramente lo que hizo la Academia sueca fue apostar por lo inesperado, o por lo menos esperado, sobre todo con las recientes controversias por las que ha atravesado el premio, y esto es muy positivo no solamente para Gurnah, sino para su propio contexto literario, para la literatura de su nación, de su continente y los temas que trata”, destacó el doctor en Letras Inglesas.
Es importante pensar, indicó el también integrante del Sistema Nacional de Investigadores, que en una lengua tan hablada como el español solo tres de las obras novelísticas de Abdulrazak Gurnah se tradujeran, “lo cual no es tan poco, pero es importante que se le deba traducir y promover más”.
Hay que leer a Gurnah y a escritores de su generación, de su ámbito, y una buena manera de empezar es con la antología que el Seminario Permanente de Traducción Literaria de la FFyL de la UNAM publicó hace diez años: “Todos cuentan. Narrativa africana contemporánea (1960-2003)”, que incluye un cuento del ahora Premio Nobel de Literatura, recomendó.
“Los dos tomos deben estar en librerías de la UNAM, y hace una década que hicimos esta antología nunca nos hubiéramos imaginado que un escritor como Gurnah se ganaría este reconocimiento; en estos casos es un gusto que a uno le dinamiten la duda”, apuntó.
Se trata de dos tomos resultado del Seminario, en el cual participaron: Charlotte Broad, Flora Botton-Burlá, Eva Cruz Yáñez, Marina Fe, Mónica Mansour, Mario Murgia y Federico Patán. Como traductores invitados: Nair Anaya, Claudia Lucotti y Elika Ortega; fue coeditado por la Dirección de Literatura de la UNAM.
Sus letras
La lengua materna de Gurnah es el suajili, pero adoptó el inglés como lengua literaria. En su prosa a menudo hay rastros de suajili, árabe y alemán. “Sus novelas se centran en personajes, muy bien desarrollados, entrañables, son personajes inteligentes, críticos, directa o indirectamente de su propia situación, su narrativa, por supuesto tiene que ver con problemas como el de la migración, que a él mismo le concierne, de forma directa; es un tema recurrente en toda su obra”, detalló Murgia.
No obstante, eso no le impide desarrollar otros aspectos de su quehacer, es un autor que está interesado en su propio manejo de la lengua; es decir, que “está consciente de los alcances de ésta y de la creación literaria como tales”, apuntó.
De los 118 galardones entregados desde la creación del Premio Nobel en 1901, en 95 ocasiones lo han recibido autores europeos y norteamericanos.
El Nobel de Literatura ha distinguido a 102 hombres y 16 mujeres -dos de ellas premiadas en los últimos años, en 2018 Olga Tokarczuk, y en 2020, Louise Glück-. Gurnah es el quinto africano que consigue el Nobel, después de Wole Soyinka (1986), Naguib Mahfouz (1988), Nadine Gordimer (1991) y J. M. Coetzee (2003).