Por Xóchitl Almodóvar
Durango, Dgo.
Desde hace un año el municipio de Durango, no realiza las reuniones para la planeación y desarrollo municipal, no hay auditoria a las obras públicas, tampoco a la Contraloría Municipal, todo sigue sin ser supervisado y tampoco se sabe por fin quién dará el informe de gobierno municipal, esto lo dio a conocer Jesús Frías, consejero del Copladem.
Advirtió que las inquietudes de la ciudadanía se hacen cada día mas latentes, en que la autoridad en el municipio de Durango, no se le ve ninguna forma operativa en el comité de planeación de obra para el próximo ano de gobierno y menos ha rendido cuentas de los dineros que se utilizaron en este año de gobierno, bajo una auditoria antes del próximo informe de gobierno, que ya será en los últimos días del mes de agosto.
Destacó que ninguna autoridad municipal, hasta la fecha sabe si Alfredo Herrera, alcalde suplente será el que rendirá el informe de gobierno, o será el ahora senador José Ramón Enríquez Herrera.
El consejero de Cpladem habló de que la ciudadanía no es tonta y habrá que dar explicaciones tanto el alcalde suplente como el ex munícipe en el próximo informe, aclarando varias cosas, como el otro caso de los regidores que se fueron a recibir capacitación a España, la tardanza en las obras públicas, el ordenamiento ecológico municipal en el que tampoco se ha hecho nada, “no podemos estar en espera de promesas, más bien de resultados”.
Puntualizó que la única auditoria municipal que se realizo fue al Instituto Municipal de Planeación, y fuera de este solo eventos, en los cuales se prometen más cosas a la población, pero a la hora de verificar, no hay conocimiento, no hay trabajo y es lamentable la situación municipal, “no creo que sea posible continuar otro año en las mismas condiciones”.
Para finalizar Jesús Frías, expresó su beneplácito en que la ciudadanía duranguense exija sus derechos y participe con sus opiniones, acerca de la labor municipal en estos últimos meses, porque de no ser así, las cosas seguirán bajo la misma visión y no es lo que los duranguenses se merecen.