Texto y Foto Fernando Madera
Durango, Dgo.
La sede del Poder Legislativo en Durango lució vacío, sin el personal femenino la mayoría de las áreas y oficinas solo albergaron el mobiliario inservible por la falta de las hábiles manos de quienes tiene la capacidad de realizar diversas tareas al mismo tiempo.
El secretario general del Congreso de Durango, Gerardo Bonilla Saucedo, informó que el total de las trabajadoras de la cámara, 167 féminas, decidieron sumarse al paro nacional por lo que un número importante de oficinas se encontraban vacías.
Aunque algunas habían expresado que acudirían a trabajar pero lo harían portando alguna prenda de color morado, distintivo del movimiento feminista, al final ninguna asistió a trabar y eso se reflejaba sin duda en una considerable baja en el ritmo de trabajo al interior del parlamento local.
Pero aseguró además que inclusive, las usuarias que cotidianamente acuden a realizar labores de gestoría, tampoco se presentaron y en general, el trabajo en la cámara era escaso y solo en algunas áreas atendidas por varones estaban en operación normal.
Bonilla Saucedo reconoció la importancia que reviste el trabajo de las mujeres en el Congreso de Durango, ya que sin su colaboración la productividad se ve afectada de manera significativa.