El secretario general de las Naciones Unidas, ha solicitado a México y Ecuador superar este conflicto a través del diálogo abierto.
Por Luis Juárez
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) ha dado por declarado este 11 de abril, que una eventual expulsión de Ecuador, de esta organización así como todos los asuntos relativos a la membresía, depende de los Estados miembros.
Sin embargo, el secretario general de la ONU por medio de su portavoz Stéphane Dujarric, intentó suavizar el conflicto entre México y Ecuador, al sugerir que esta situación entre ambas naciones “sean tratadas mediante el diálogo”, por lo que la misa organización se encontrará a la espera de que las tensiones disminuyan.
Ante este conflicto suscitado el 5 de abril en la Embajada Mexicana, el presidente Andrés Manuel López (AMLO), solicitó a la ONU dar una suspensión por esta irrupción en Quito, en la denuncia que presentó ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ).
Así mismo, la titular de Relaciones Exteriores de México, Alicia Bárcena, señaló que la finalidad de esta medida es que el Gobierno de Daniel Noboa, pague las consecuencias tras la violenta movilización que se presenció en contra de la Embajada de México.
Las demandas del gobierno de mexicano hacían la corte Internacional de Justicia, además de la expulsión de la ONU, por esta irrupción son:
Establecer un precedente de que cualquier nación que adopte medidas como lo fue Ecuador (es decir, que invada una embajada), deberá ser expulsado en definitiva del bloque de las Naciones Unidas; Evitar la repetición de estos casos ante el Consejo General de la ONU; Juzgar y declarar culpable a Ecuador, por los daños ocasionados.
Por otra parte, esta demanda expedida por el gobierno mexicano en relación a remover a Ecuador, de la propia ONU es en verdad complicado, dado a que, solo en una ocasión se ha removido a un estado y, esto se presentó en el año de 1971, cuando Taiwán fue despojado del asiento de la República de China, que en su lugar fue entregado a la República Popular de China.
