A pesar del rechazo internacional y el aumento del riesgo de una crisis humanitaria, Israel ha anunciado su intención de ampliar su ofensiva contra Hamas, centrándose en la ciudad de Rafah, en la frontera con Egipto.
Benjamín Netanyahu, primer ministro israelí ha reiterado en una entrevista con ABC News su determinación de seguir adelante con la ofensiva militar, destacando la importancia de esta acción para lograr la “victoria” sobre el enemigo. Netanyahu planea una invasión de las Fuerzas de Defensa de Israel en Rafah, donde se refugian más de 1.3 millones de personas, según datos de la ONU, a las que se compromete a reubicar.
El primer ministro minimiza las advertencias sobre los riesgos para los civiles en la zona y acusa a Hamas de utilizar a mujeres, niños y ancianos como escudos humanos en los túneles. Argumenta que aquellos que se oponen a su estrategia están, en realidad, favoreciendo a los terroristas y sugiere que Israel está actuando en legítima defensa.
También comparó la respuesta de Israel con la que habría dado Estados Unidos en circunstancias similares, sugiriendo que cualquier otra nación habría actuado de manera similar en defensa propia.
La escalada de la violencia y la retórica inflamatoria de Netanyahu han generado preocupación a nivel internacional, con llamados a la contención y a buscar una solución diplomática al conflicto. Con información de Índice Político
