El presidente del Senado, Alejandro Armenta, denunció recibir amenazas el martes desde el número celular de la ministra presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Norma Piña Hernández.
Fue al inicio de la sesión plenaria de la Comisión Permanente, cuando Armenta la hizo pública y anticipó que las amenazas tendrían el objeto de amedrentarlo por su “desempeño legislativo”.
Armenta Mier presentó una iniciativa para que los ministros de la SCJN sean electos en las urnas directamente por la ciudadanía y no como ocurre actualmente, donde el presidente de la república propone ternas para designarlos, y son votadas para su ratificación por el Senado.
“A las 9 de la noche con un minuto recibí un conjunto de mensajes presuntamente del teléfono de la ministra presidenta de la Corte. Me entero posteriormente que a mí secretaria a las 8 de la noche, Daniela, le hacen una llamada por mensaje de texto, donde le dicen, se apersonan con el nombre de Francisco Tapia, asesor de la ministra presidente, quien busca mi número telefónico para ponerse en contacto conmigo.
La secretaria técnica, Daniela, que aquí se encuentra presente, le da mi número telefónico y empieza una conversación a las 9 de la noche con un minuto. No juzgo, no prejuzgo, quiero informar a la soberanía el hecho”, dijo el senador.
Grupo Imagen accedió a las copias de los presuntos mensajes de texto de la ministra Piña al senador Armenta a través de mensajes de WhatsApp que mostró Alejandro Armenta y dicen los siguiente:
“Usted puede ver a los ojos a sus hijos o hijas después de lo que dice (…) La vida nos juzgará (…) Estoy convencida que la verdad siempre triunfa”.
“Soy maestra. Entiendo perfectamente la situación del país. No soy de clase privilegiada, ni micho menos. Mi desarrollo profesional es producto de la clase del esfuerzo”
Alejandro Armenta dio a conocer que ha enviado un escrito a la presidenta de la SCJN, en el cual relata los hechos y pide que se aclare si el número es de ella:
“Recibí mensajes a las 9:01 pm con la muy probable intención de presionar, de intimidar, o incluso de pretender amenazar al suscrito por mi desempeño como legislador federal, contraviniendo con ello lo dispuesto en el Artículo 61 de la Carta Magna, por lo anterior sirva el presente, para que, bajo protesta de decir verdad, y contando con su invaluable apoyo, se puedan clarificar formalmente los hechos narrados”, señala la carta enviada.