Por Gonzalo Martínez
En un movimiento que podría redefinir el equilibrio de poder en el Senado mexicano, los senadores electos del PRD, Araceli Saucedo Reyes y José Sabino Herrera, han decidido unirse a las filas de Morena. Este cambio estratégico, anunciado durante la Reunión Plenaria de Morena en un hotel de la Ciudad de México, acerca al grupo oficialista a la ansiada mayoría calificada en la Cámara de Senadores.
La noticia fue recibida con entusiasmo por los miembros de Morena, quienes aplaudieron y ovacionaron a los nuevos integrantes. Con la incorporación de Saucedo y Herrera, Morena y sus aliados ahora cuentan con 85 senadores, quedando a tan solo un legislador de alcanzar los 86 necesarios para tener la mayoría calificada, clave para realizar cambios constitucionales sin necesidad de negociar con la oposición.
Adán Augusto López, quien lideró la plenaria, ha sido designado como el próximo coordinador de la bancada en el Senado, una posición desde la cual supervisará los esfuerzos para consolidar esta mayoría calificada. La decisión de los senadores del PRD llega en un momento crítico para su antiguo partido, que ha visto disminuir su influencia y ha perdido su registro como partido nacional, situación que probablemente influyó en su cambio de afiliación.
En días recientes, tanto Saucedo como Herrera habían evitado comentar sobre su posible unión a Morena, lo que generó especulaciones sobre su futuro político. Este desenlace refuerza la posición de Morena y resalta la fragilidad actual del PRD.
Manuel Velasco, del Partido Verde, también intervino en la discusión, señalando que su partido ya cuenta con los tres legisladores necesarios para completar la mayoría calificada en el Senado. Este respaldo es crucial para la aprobación de la reforma judicial impulsada por el presidente Andrés Manuel López Obrador, que se espera sea uno de los temas centrales en la nueva legislatura que inicia el 1 de septiembre. La llegada de Saucedo y Herrera a Morena no solo amplía la bancada oficialista, sino que también representa un cambio significativo en el panorama político del Senado. Con la mayoría calificada al alcance, Morena está en una posición privilegiada para avanzar en reformas clave, consolidando su poder en la nueva legislatura.
