40 estados en Estados Unidos reportaron niveles altos de casos de influenza la semana pasada, según los últimos datos de salud gubernamentales.
“Hay mucha influenza”, dijo Carrie Reed epidemióloga de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC por sus siglas en inglés).
Explicó que existen varios virus que causan fiebre, tos, dolor de garganta y otros síntomas similares a los de la influenza. Uno es al Covid-19. Otro es el VRS, o virus respiratorio sincitial, que es una causa común de síntomas similares a los del resfriado, pero puede ser peligroso para bebés y ancianos.
“Varias cepas de la influenza estacional están impulsando los casos, sin que haya una dominante”, añadió.
Los hospitales pediátricos han estado ocupados desde noviembre con el VRS, pero “la influenza ahora se ha unido a la fiesta”, dijo el doctor Jason Newland, especialista en enfermedades infecciosas del Hospital Infantil Nationwide de Columbus, Ohio.
“Ahora realmente estamos empezando”, agregó. “Nuestros hospitales están ocupados”.
Reed señaló que la mayoría de las personas evitan citas médicas durante las fiestas decembrinas si pueden evitarlo, por lo que los datos a finales de diciembre podrían estar sesgados por personas que contrajeron enfermedades repentinas.
La actividad de la influenza la semana pasada fue particularmente intensa en el sur, suroeste y oeste de Estados Unidos; los estados que reportaron menores cantidades de casos estaban principalmente en las Grandes Llanuras del norte y en Nueva Inglaterra.
Hasta ahora esta temporada, los CDC estiman que ha habido al menos 5.3 millones de casos de influenza, 63 mil hospitalizaciones y 2 mil 700 muertes, incluyendo de al menos 11 niños.
De momento no está claro si esta temporada de virus respiratorios de invierno será peor que las anteriores. Hasta ahora parece relativamente típica, al menos para los niños, señaló Newland.