Por Gonzalo Martínez
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha anunciado una orden ejecutiva destinada a restringir de manera significativa las solicitudes de asilo en la frontera con México, marcando una de sus medidas migratorias más severas justo en el camino hacia las elecciones de noviembre próximo.
Esta orden, que entrará en vigor este mismo martes, autorizará a las autoridades estadounidenses a deportar a aquellos que no cumplan con estrictos estándares de asilo una vez que se supere la cifra de dos mil 500 detenciones diarias en la frontera, según informaron altos funcionarios estadounidenses a la prensa.
El umbral de dos mil 500 detenciones ya ha sido superado, con un promedio de cuatro mil 200 arrestos diarios en abril, la última cifra oficial disponible.
Los protocolos para solicitar asilo se relajarán nuevamente una vez que la cifra de detenciones disminuya a mil 500 en promedio durante 14 días. Sin embargo, alcanzar este objetivo puede ser difícil, ya que la última vez que el promedio de detenciones bajó a mil 500 fue en julio de 2020, en plena pandemia.
Según los funcionarios, aquellos que lleguen a la frontera una vez que se supere el umbral de dos mil 500 estarán sujetos a estándares más rigurosos para calificar para asilo. Deberán demostrar una “posibilidad razonable” de estar en riesgo de sufrir torturas o persecución si son devueltos a su país de origen.
Aquellos que no puedan demostrar que califican para asilo bajo este estándar más alto serán deportados en cuestión de “horas” o “días”, según indicaron los funcionarios.
Las excepciones incluyen a los no acompañados que viajan hacia el norte, las víctimas de tráfico de personas, aquellos que enfrentan una emergencia médica aguda o una amenaza extrema para su vida y seguridad.
Los ciudadanos mexicanos o de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela serán devueltos directamente a México, mientras que los procedentes de otras partes de América, como Colombia o Ecuador, serán expulsados en vuelos de deportación.
La normativa también seguirá procesando los casos de asilo de quienes hayan solicitado una cita a través de la aplicación móvil CBP One, que ofrece aproximadamente mil 450 citas diarias.
Biden firmará la orden ejecutiva, su medida unilateral más agresiva hasta la fecha tras los intentos fallidos de alcanzar un acuerdo bipartidista en el Congreso, en un evento en la Casa Blanca acompañado por varios alcaldes de la frontera.
Esta orden llega a seis meses de las elecciones, donde Biden busca la reelección y se enfrentará nuevamente al expresidente Donald Trump, cuya campaña ya ha criticado la medida llamándola “amnistía”.