Día del Arte Rupestre…
Texto y Fotos: Geraldo Rosales
Durango, Dgo.
Hoy 9 de octubre es el Día Europeo del Arte Rupestre, para conmemorar este día los principales enclaves europeos con arte rupestre, incluyendo yacimientos arqueológicos, museos, centros de interpretación y centros culturales celebrarán de manera coordinada una jornada de puertas abiertas y de celebración del valor y relevancia del arte rupestre para la sociedad europea.
La fecha fue elegida por el Consejo de Europa y la Comisión Europea como Día Europeo del Arte Rupestre ya que es una fecha muy vinculada a la historia de este tipo de manifestaciones que se trataban de pinturas y grabados sobre la piedra realizados durante el Paleolítico Superior (entre hace 45000 y 13000 años) por cazadores-recolectores.
La Ferrería, ruinas parte de nuestro folclor e identidad
Durango es un estado lleno de cultura y tradición, grandes vestigios que en la actualidad existen son muestra visible y palpable, ruinas que son parte de nuestro folclor e identidad, prueba de ello se ubica en el sur de la ciudad, justo en el corazón del pablado La Ferrería, se ubica la zona arqueológica de la cultura chalchihuites.
Se dice que la primera noticia científica sobre este sitio fue en 1948, por el antropólogo norteamericano Alden Masón; cuatro años después Charles Kelley, con un grupo de estudiantes de Universidad de Chicago, inició los primeros trabajos de investigación, a raíz de los cuales extrajo múltiples piezas arqueológicas y preparo tres ensayos.
Vestigios de grupos humanos que existieron en el pasado dan fe de que en ese sitio habitaron al igual que un grupo sedentario, el cual hizo las construcciones que están en el cerro y que son las de mayor tamaño, subsistía básicamente de la agricultura de maíz, frijol y calabaza y que practicaba la caza y la recolección para completar su dieta.
Debido a su cercanía con el río Tunal, se piensa que también parificaron la cacería de aves que lo rondaban y al mismo tiempo la pesca, se piensa que este sitio estuvo ocupado en diferentes ocasiones entre los años 875 y el 1450 de nuestra era.
Aproximadamente a la mitad de la pendiente de cerro existe un área habitacional que tiene un pequeño patio hundido, se le conoce como la casa de piso de piedra, a sus lados están los restos de algunos recintos, el mayor de estos se ubica hacia el sur y para construirlo los trabajadores indígenas excavaron una gran parte de la roca madre, cabe señalar que nos e contaba con herramientas de metal.
Una de las construcciones mas deterioradas de este sitio arqueológico es el juego de Pelota, se trata de un pequeño espacio que tiene la forma de una “I” típica de Mesoamérica, en los lados se encuentran los restos de dos banquetas adyacentes a muros de piedras paralelos que marcan el área de juego propiamente, este juego de Pelota debió ser destruido en el curso de la época colonial posiblemente para desterrar la costumbre indígena de practicarlo ya que no se trataba de un simple juego si no de una forma de culto muy respetada.
Al pie del cerro se encuentra la gran pirámide, la cual ese utilizaba para el estudio de la astronomía que tenían los constructores del sitito, esta construcción escalonada es el basamento del templo principal de la ciudad, tiene dos cuerpos edificados sobre una plataforma, escaleras y rampas.
Es la “casa de los dirigentes” la mas compleja que se ha localizado en el sitio, tiene un patio hundido excavado en la roca madre, varias plataformas en donde quizás estaban las habitaciones, un pasillo elaborado hacia el lado este y los restos de lo que fue tal vez un pequeño adoratorio, hacia el cerro, por su ubicación se dice que debió ser de carácter religioso.
En la cercanía de la casa de los dirigentes estas los cimientos de un pequeño templo de plata circular que es una de las muestras de la influencia de los grupos del norte en las culturas de Durango, esta unidad esta muy deterioradas, sin embargo se puede apreciar una banqueta y un pequeño canal.
Los petrograbados en la zona, lugar de deidades protectoras
Los petrograbados son dibujos o gráficas rupestres ejecutadas por percusión en las piedras con o sin uso de pigmentos. Generalmente, están ubicados en el lugar de origen donde fueron confeccionados, algunos son de gran tamaño (permanentes o semipermanentes), mientras que otros fueron hechos en piedras más pequeñas y por ende, transportables.
Existen dos piedras grandes con grabados, una muestra una pequeña imagen, que representa a un sacerdote con los brazos en alto y que porta un tocado ceremonial con una cornamenta. La roca fue parcialmente pulida y es el punto central de una pequeña área dedicada al culto, tal vez considerada lugar de deidades protectoras. La segunda se localiza al pie del cerro, está muy deteriorada, se puede identificar una escena de cacería en la que aparece un hombre con un arco, asociado a dos mamíferos que pueden ser venados.
“El cazador representa lo que es una deidad solar y los vendaditos representan a venus como estrella de la mañana, son los que le ayudan al nacimiento del sol que nace de la sierra del registro y el pirograbado principal está orientado a donde nace el sol, entonces es un personaje hablando de deidades es como pedirle a Dios, hacían sus ceremonias y su petición y datan aproximadamente del año 600 a 1350 que es cuando el lugar queda totalmente solo, la última cultura que se asentó ahí fue la cultura Chalchihuites, antes de este grupo estuvieron otros”, así lo cuenta José Ángel Álvarez guía de esta zona.
Los diseños predominantes de los petrograbados son referentes a animales, naturaleza o fitomorfas (formas de plantas), figuras humanas y símbolos abstractos o geométricos. Esos diseños se pueden encontrar solos en la superficie de las piedras o formando combinaciones.
-Diversas estructuras circulares y objetos
Dentro de este sitio también se encuentran diversas estructuras circulares de las cuales las más elaboradas se localizan en la parte más alta del cerro, otras son muy sencillas y casi se reducen al simple ordenamiento de grandes tocas circulares, algunas son restos de edificaciones que se dedicaron al culto de Ehécatl.
En este sitio se han encontrado objetos como: pedazos de cerámica, algunas piezas completas de lítica como puntas de flecha, hachas y morteros, según los arqueólogos es un asentamiento prehispánico en el que se hallan estructuras piramidales, columnas, patios hundidos, piedras grabadas y un juego de pelota, elementos que son rehabilitados para revertir el deterioro ocasionado por las inclemencias del medio ambiente.
Otras de las cosas que se han encontrado en este lugar son huesos de aves y anillos de piedra que emparientan a la cultura de la Ferrería con la tradición e las culturas del suroeste norteamericano , a partir de investigaciones realizadas por arqueólogos, antropólogos y personal del Centro INAH-Durango, que La Ferrería ocupa un área aproximada de 52 hectáreas, las cuales corresponden casi totalmente a la superficie de un pequeño collado, denominado por algunos investigadores como el Cerro de Ayala.
Durante el año 2010 el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en Durango, ejecutó un presupuesto de 12 millones 313 mil 620 pesos, los cuales fueron destinados al rescate de monumentos históricos enclavados en siete algunos municipios de la entidad, y que permitieron rehabilitar ex haciendas, templos, capillas y edificios prehispánicos, trabajos de mantenimiento y consolidación se realizaron en los edificios prehispánicos de la Zona Arqueológica de la Ferrería, tanto en caminos como escalinatas y andadores.
“La Ferrería” es una zona arqueológica ubicada en el municipio de Durango, a siete kilómetros de la capital del mismo estado, que debe su nombre al establecimiento de una fundidora durante el siglo XIX, la cual aprovechó el material de la región hasta 1893, año en que sus instalaciones fueron cerradas.
Ficha técnica
Zona Arqueológica de La Ferrería
Horario: martes a domingo de 9:00 a 17:00 horas.
Costo: 75 pesos.
