Desde 1970, el Señor Vela comenzó una tradición que actualmente continúa moldeandose a las nuevas modas.
Por: Areli Noriega.

Don Jesús Vela era un artesano qué fabricaba huaraches, fue por un cliente que le pidió un par de botas y al no ser experto en ese calzado, deshizo un botín qué encontró en la basura.A partir de ese momento, la familia Vela comenzó con la fabricación de botas, tradición que pasó de Jesús Vela a sus tres hijos, los hijos a los nietos y así continuar con el negocio familiar.
Actualmente, la Señora Sonia Vela, esposa de uno de los hijos del Señor Jesús Vela, es quien dirige el negocio de las botas, misma que aprendió a la fabricación de estas.Durante la entrevista, nos explicó que la bota campera es la tradicional de Durango. Utilizando pieles de res, mula, cocodrilo, venado, pescado, avestruces, entre otras.


Además de la creación de botas, se fabrican cinturones, zapatos, carteras, y lo más importante, la personalización del calzado, como marcar iniciales, un tacón más alto que otro, el color de la suela, entre otros. Identificandose por la alta calidad que los distingue.
“Una cosa que ha caracterizado aquí nuestro negocio es la responsabilidad”, comentó la señora Sonia, “es muy fácil agarrar el dinero y no cumplir, pero esto ha caracterizado a Botas Vela, que cumplimos”, finalizó.