Por Fernando Madera
Durango, Dgo.- Durante la reunión entre familiares de víctimas de abuso sexual y legisladores locales, la diputada Marisol Carrillo Quiroga sentenció “no vamos a permitir que ningún maldito siga libre” y enseguida reveló haber sido víctima de abuso en su niñez.
La tarde de ayer en la sede del parlamento local, se reunieron los integrantes de la Comisión de Derechos Humanos, donde se esperaba la presencia de la hasta ayer Fiscal General del Estado, Ruth Medina Alemán, quien durante la mañana presentó su renuncia al gobernador del estado, José Rosas Aispuro Torres.
Al encuentro no acudió ningún representante de la Fiscalía, era uno de los principales objetivos para que respondiera a cada uno de los reclamos expresados por los padres de familia que durante meses, y otros, durante años, han exigido se haga justicia.
Tras escuchar cada caso, la primera en tomar la palabra fue la diputada del partido MORENA, Marisol Carrillo Quiroga, quien visiblemente conmovida reconoció la valentía de Ivanna, la joven que denunció públicamente a quienes fueron sus probables violadores.
Con la voz entrecortada, sentenció “no vamos a permitir que ningún maldito siga libre” y enseguida reveló que cuando tenía ocho años, un familiar abusó de ella. Lo dijo llorando y con el dolor que a sus 51 años aún existe.
Agradeció a Ivanna por ser la voz de las mujeres que han pasado por un abuso, y lo que su valentía ha generado en la sociedad; dijo que gracias a su testimonio, a su exigencia, ella hoy se atreve a decir públicamente lo que por años ha guardado.
Sentenció que hará todo lo posible para que los responsables de violaciones y abuso sexual, terminen en la cárcel.
Señaló finalmente que no debe estigmatizarse a quienes han sufrido este tipo de abusos, se debe señalar al que ha abusado, al que ha violado y no a quien es la víctima en este tipo de delitos que causan un daño que difícilmente se logra superar completamente.
