Por Gonzalo Martínez
La novela con la que la mexicana Fernanda Melchor se convirtió en escritora, Temporada de huracanes, se estrenará en formato film el próximo 1 de noviembre bajo la dirección de Elisa Miller y se podrá ver en la plataforma de Netflix.
Nacida en Veracruz en 1982, periodista y escritora, Melchor publicó el volumen de crónicas Aquí no es Miami y su primera novela Falsa liebre en el año 2013, pero fue con Temporada de huracanes (Random House) en 2017, cuando su nombre arrasó en la escena literaria. La novela se tradujo a más de quince idiomas y coronó su aparición con varios premios, entre ellos la nominación como finalista del Premio Booker Internacional.
En la novela, que Netflix acoge en su catálogo desde este miércoles, Melchor se mete con la violencia y la miseria, a partir de una historia que comienza cuando un grupo de niños encuentra un cadáver flotando en las aguas de un canal de riego cercano a la ranchería del pueblo ficticio de La Matosa, un poblado que inspira en Veracruz, el lugar de origen de la escritora. El cuerpo resulta ser de la Bruja, una mujer que heredó dicho oficio de su madre fallecida y a quienes los pobladores de esa zona rural respetaban y temían.
“Difícilmente el libro se puede ver a veces, pero esta película se disfruta, se sufre, se goza también. Visualmente es riquísima”, destacó la escritora sobre la adaptación de su novela, según lo citado por el diario El País. Si bien ella no participó de la versión fílmica, sí acompañó el proceso con algunos apuntes y aceptó la adaptación por tratarse de Miller. “Temporada de huracanes” llegó como finalista a mejor largometraje mexicano en el Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM).
“Desde la fantasía uno puede crear imágenes, pero una cosa es crearlas y describirlas y otra recrearlas. Hay otras implicaciones”, planteó Melchor sobre los efectos de la narración en distintos formatos. Consciente de esto, ahí estuvo la mirada de la directora para adaptar sin cambiar la tónica de la novela: “Había cosas que, en mi lenguaje, eran muy rudas. La violación grupal estuvo en el guion. Tenía el grupo de chamacos, la camioneta, la chava, todo. Pero no pude ponerlo en escena, me superaba. Parte de mi traducción fue pasarlo por un filtro un poquito más amoroso”, sostuvo Miller.
Con información de Infobae